confesiones de (semi) invierno

hace mucho tiempo que no pongo mi arañado y empolvado cd de sui generis en la lectora. decidí guardarlo bien al fondo porque me hacía daño. pero esta última semana de mi vida, la primera frase de "confesiones de invierno" llegó inminentemente a mi cabeza...tengo una desagradable sensación incrustada en mi mente...y en el alma...y no puedo sacármela, por más que quisiera tener ese borrador mágico para borrar todos los errores cometidos. es como cuando usas UHU y se te quedan pegados el índice y el pulgar, y cuando quieres que los otros dedos ayuden a sus hermanos a despegarse, terminas con los cinco pegoteados, formando un muppet manual que te hace sentir estúpido, sobretodo si suena el teléfono. y si te quieres limpiar el culo así ya es otro lote.

en fin. tengo esa melodía triste vagabundeando por mis neuronas, hasta puedo sentirlas en forma de susurro en los oídos. el airecito estos días esta helado y burlón. por momentos cierro los párpados y quisiera tanto que al abrirlos alguien estuviera delante de mi con los brazos abiertos, reservándome un abrazo tierno y cálido...solo para mi. un abrazo gigante, un abrazo reconfortante. que, así como ayer cuando miraba el mar con mi hermano T, me diga que "allá donde está cayendo el sol esta tu casita". allá donde esta cayendo el sol....

Me echó de su cuarto gritándome
No tienes profesión
Tuve que enfrentarme a mi condición
En invierno no hay sol
Y aunque digan que va a ser muy fácil
Es muy duro poder mejorar
Hace frío y me falta un abrigo
Y me pesa el hambre de esperar
¿Quién me dará algo para fumar
O casa en que vivir?
Sé que entre las calles debés estar
Pero no sé partir
Y la radio nos confunde a todos
Sin dinero la pasaré mal
Si se comen mi carne los lobos
No podré robarles la mitad
Dios es empleado en un mostrador
Da para recibir
¿Quién me dará un crédito, mi Señor?
Sólo sé sonreír
Y tal vez esperé demasiado
Quisiera que estuvieras aquí
Cerrarán las puertas de este infierno
Y es posible que me quiera ir
Conseguí licor y me emborraché
En el baño de un bar
Fui a dar a la calle de un puntapié
Y me sentí muy mal
Y si bien yo nunca había bebido
En la cárcel tuve que acabar
La fianza la pagó un amigo
Las heridas son del oficial
Hace cuatro años que estoy aquí
Y no quiero salir
Ya no paso frío y soy feliz
Mi cuarto da al jardín
Y aunque a veces me acuerdo de ella
Dibujé su cara en la pared
Solamente muero los domingos
Y los lunes
ya me
sien - to - bien
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en este teclado hay tres botones que quisiera tener incrustados en mi cuerpo:
WAKE UP
SLEEP
y
POWER.
pero siempre estoy shut down.