viernes, 22 de junio de 2007

esta niña nos necesita

¿Se imaginan tener ocho años y quedarse sin una pierna...
y que ese sea el mal menor?


Ahora imagínense a la madre de ésta pequeña niña, que cada día muere un poco más al tratar de encontrar las palabras menos dañinas para que, cuando su hija Selene salga del sueño anestésico en el que se encuentra para mitigar sus múltiples dolores, le diga que su piernecita derecha estaba tan destrozada que tuvieron que amputarla. Que ya nunca más correrá en los recreos, que no va a poder practicar su deporte favorito, el Tae Kwon Do, y que hasta nuevo aviso su fiel compañera será una silla de ruedas (si es que se la donan).


Decirle también que nunca podrá tener hijos porque le extirparon el útero, de lo dañado que estaba. Y tendrá que armarse de valor y explicarle que, día tras día, tendrá que ayudarla a miccionar hasta que ella sepa como hacerlo sola, o hasta que luego de muchísimas operaciones le reconstruyan los órganos genitales y el sistema urinario. Y quizás lo más difícil sea explicarle que ella no tuvo la culpa de nada. Que como muy pocos cruzó bien la pista, que siguió fielmente las reglas de cruzar en rojo y por las líneas blancas peatonales...que un grandulón de treinta y tantos años, que todavía sigue libre manejando su camión, se quiso hacer el vivo y se pasó el rojo, y se le pasó la mano, y le pasó por encima a ella y a su amiguita que tiene el brazo roto en el cuarto de al lado.


Tiene solo ocho años, y cuando las cámaras le preguntan como se siente, ella solo responde que le da pena no estar con su familia en casa...que ya quiere irse, que le duelen las piernas. Tiene solo ocho años y no tiene ni la menor idea de lo que le ha pasado y de todo lo que tendrá que pasar.




El punto es que el SOAT ya cubrió todo lo que debía. Pero como adivinaran, eso ha sido nada a comparación de todo lo que necesita esta niña para seguir en el hospital, para el tratamiento, y para reconstruir su vida. Porque es obvio que ya nada volverá a ser igual.


Yo ODIO las cadenas, pero por favor pasen este post como un mail,
y donen lo que este a su alcance.

Las diez lucas de la chela del viernes (que saca guata), los seis soles del menú de un día (hagan dieta pe), las cinco lucas de la cajetilla de cigarrillos (que mata), las tres lucas del DVD bamba del domingo, las dos lucas del pasaje (ir a pie es saludable), la luca de la gaseosita y la china de las galletas.


Si alguien tiene un pariente doctor que sea especialista en esos casos, o conocen a los bola roja que la hagan sonreír un rato, pásenles la voz. Donen lo que puedan, a cambio de tratar de recuperar la inocencia y la fe que Selene solía tener, y que creo que poco a poco va a perder con éste horrible accidente.

Los niños son primero. Por favor ayudémosla.

Este es el número de cuenta, lo pedí a 90 Segundos, pero igual cuando depositen pueden comprobar el número de cuenta a los teléfonos del papá, Hugo Barreto, y supongo que en el mismo banco se podrá preguntar (soy un poco ignorante en esto de los depósitos y esas cosas).

EL NUMERO DE CUENTA ES:
04-483-070026
DEL BANCO DE LA NACION,
A NOMBRE DE SU PAPÁ HUGO BARRETO.
TELÉFONOS: 90483108 --- 93789310

más detalles, aquí:
http://www.frecuencialatina.com.pe/90segundos/detalle.asp?Catid=89&NewsId=23602

"Selene, de ocho años, es una víctima más de los choferes irresponsables.El saldo de la negligencia es devastador. No sólo perdió la pierna derecha; sus órganos genitales, su sistema urinario, sus intestinos y su cadera quedaron completamente destrozados. Su espalda y abdomen requieren un urgente trasplante de piel, por lo que su pronóstico es reservado. El viernes pasado Selene y su compañera Cristina salían de su colegio Santa Rosa en Comas con dirección a sus casas, pero en el camino un camión las arrolló. Como consta en el parte policial, el chofer del vehículo no portaba DNI ni brevete. El sujeto se dijo llamar Freddy Blacio Huapaya, pero ese nombre no existe en el Reniec"

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Maldito hijo de puta. En casos como éste no puedo guardar la compostura y me en-can-ta-rí-a tener una basuca y matar a esos salvajes.
¿Y la ley, la constitución que vela por el bien del ciudadano?, ¿y los congresistas, los curas?, todos, carajo, preocupados en cualquier mierda menos en la gente QUE LOS NECESITA.

Anónimo dijo...

Ah!, y ya pues, SÓLO quedamos nosotros. Que el cadáver, ay, no siga muriendo y se eche a andar...